Navidad en Iparralde

Lo sé, lo sé, a este paso voy a ser como la canción Christmas in July, pero entre que en diciembre hice varios viajes y que luego han surgido otros temas más candentes sobre los que escribir, nos hemos plantado en mayo y no he compartido mi experiencia con las navidades en Iparralde.

El fin de semana del puente de la Inmaculada visitamos tres de sus localidades más emblemáticas para descubrir cómo se engalanan en estas fechas.

Biarritz

Un mercado navideño frente al mar, con algunas atracciones para los más pequeños, es uno de los grandes atractivos de esta ciudad tan señorial, junto con la preciosa iluminación del puente de piedra que lleva a Rocher du Basta.

Biarritz Navidad puente iluminado

Baiona

La joya de la corona, en lo que a Navidad se refiere. La capital de Lapurdi tiene un mercado con el mismísimo Olentzero, una noria gigante y desfile de Papa Noel.

Baiona en Navidad

Además del plato fuerte hasta 2023: la suelta de farolillos. Prohibidos a partir de este año, el día que acudimos se suspendió debido a las condiciones meteorológicas adversas, pero eso no impidió que muchas personas que ya los tenían en su poder los lanzasen igualmente. El espectáculo en el cielo era precioso.

Suelta de farolillos en Baiona en Navidad

San Juan de Luz

El pueblo costero tiene menos adornos que sus vecinos, pero siempre merece la pena pasear por sus calles y entrar en sus coquetas tiendas.

Árbol de Navidad en San Juan de Luz

En definitiva, es una zona muy bonita y recomendable para recorrer y en días tan señalados aún más.

En 2024 me gustaría centrar mis escapadas navideñas en Cantabria que cada vez está apostando más por atraer este tipo de turismo.

Disneyland en Navidad, ¿es para tanto?

Once años después de mi primera visita a Disneyland París mi vínculo con estos parques se ha afianzado tras disfrutar del de Orlando en 2017 (realmente impresionante en su magnitud) y del de California (el pionero) y nuevamente el de la capital gala en 2018 (gracias a mis queridas amigas que me organizaron una despedida de soltera maravillosa).

Sin embargo, me faltaba descubrir Disneyland en Navidad. Había escuchado, por activa y por pasiva, que era algo inigualable, así que con mis expectativas por todo lo alto me encaminé hacia la ciudad del amor en diciembre y tengo que admitir que me decepcionó.

Castillo de Disneyland París

La combinación Disney y Navidad es infalible y la decoración y espectáculos de la época son muy bonitos. El problema es que hay muy poco de ambos para mi gusto.

Main Street luce precioso con su árbol navideño gigante y sus personajes disfrazados.

Árbol de Navidad - Main Street - Disneyland París

Además, caen copos de nieve artificiales que le dan un aire mágico y la iluminación nocturna es divina.

Main Street Navidad - Disneyland París

Respecto a los espectáculos, la cabalgata, cerrada por el mismísimo Santa Claus, es impresionante y en Let´s sing Christmas! Mickey y sus amigos entonan famosos villancicos.

Espectáculo Let´s sing Christmas - Disneyland París

¿El problema? Que aquí se acaba todo. Admito que quizá esperaba mucho, pero me resulta escaso para la fama que le precede.

Sin embargo, siempre es un placer visitar Disneyland y, junto a los clásicos, como la pegadiza y alegre It´s a small world, el vuelo de Peter Pan, Piratas del Caribe y Blancanieves y los siete enanitos (cuyo bosque embrujado aterrorizó a mi hijo) no hay vez que no descubras algo nuevo.

En esta ocasión, montamos por primera vez en el trenecito; vimos Mickey´s PhilharMagic, que engancha en formato 4D; y los musicales de El rey león (a la altura del original) y Frozen (algo más flojo).

El rey león - Espectáculo Disneyland París

También me alegró comprobar que mi hija de un año podía montar en bastantes atracciones, lo que nos permitió hacerlo en familia.

El macroproyecto que tienen previsto en Walt Disney Studios, con la recreación de Arendelle, de Frozen, y de Tatooine, de Star Wars, augura una larga y exitosa vida a Disneyland París y más futuras visitas de servidora.

Mapa Proyecto futuro Walt Disney Studios Paris

Más parques temáticos:

Lo mejor de 2023

Por muy positiva que sea, no catalogaría 2023 como uno de los grandes años de mi vida, aunque sí ha sido un año en el que he tomado decisiones de vital importancia, que hubiera preferido no verme obligada a tomar, y en el que he comprobado hasta dónde llegan los límites del dolor.

Los últimos doce meses han estado marcados por graves problemas de salud en mi familia, que nos han hecho superar mil y un obstáculos. Sin embargo, bien está lo que bien acaba y ahora todas están en proceso de recuperación y mejora.

Tengo muy buenas sensaciones para 2024, año que contiene mi número favorito y en el que cambio de década. El primer cuatrimestre comienza con mucho ritmo y cargado de proyectos interesantes.

En 2023 ha habido también buenos momentos y es de ellos de los que quiero acordarme en este repaso:

Viajes

Volver a mi adorada Londres es casi una necesidad y verla desde unos ojos diminutos le da otra dimensión. También hemos estado en Paris y disfrutado de Disneyland en Navidad, así como de Baiona, Biarritz y San Juan de Luz en estas fiestas. Prometo contar más sobre estos lugares en los próximos meses.

Seguir descubriendo Cantabria infinita, con sus pueblos y sus rincones, y Madrid, con sus museos y sus vistas, ha sido muy agradable.

Dos imágenes. En la de arriba vista de la plaza Cibeles en Madrid. En la de abajo casona típica de un pueblo cántabro

Musicales

La historia interminable, Charlie y la fábrica de chocolate y Cantando bajo la lluvia han sido las novedades de 2023. Me han gustado todos, pero hago una mención especial al primero y su espectacular puesta en escena.

Fachada del teatro donde se representaba el musical La historia interminable

Música

Mi adorado Melendi ha celebrado 20 años sobre los escenarios y ha sido un placer disfrutar de su directo.

Cartel de la gira de Melendi 20 años sin noticias

Libros

Empecé el año con títulos más invernales como El día que dejó de nevar en Alaska, lo continué con más primaverales como La cuenta atrás para el verano, llegué a las lecturas veraniegas y lo he terminado con Diciembre (no es lo mismo) sin ti. Pronto escribiré sobre mis más recientes descubrimientos literarios.

Portadas de cuatro libros: El día que dejó de nevar en Alaska, La cuenta atrás para el verano, Beach house Summer y Diciembre (no es lo mismo) sin ti

Os deseo un 2024 repleto de paz, amor y con mucha, mucha, mucha salud.

¡Feliz año nuevo!

Cinco excursiones por Cantabria

Septiembre es un mes ideal para descubrir nuevos lugares. Proponemos cinco excursiones por Cantabria: Liérganes, el parque mitológico de Mina Pepita, Bárcena Mayor, Carmona y el puente colgante de Rasines.

Liérganes

Pasear por el barrio el Mercadillo de Liérganes es observar preciosas casas típicas y, además, la localidad es conocida por la leyenda del hombre pez.

En 1674, el lugareño Francisco de la Vega Casar se fue a nadar al río Miera con sus amigos y desapareció en sus aguas. Cinco años más tarde unos pescadores lo encontraron en la Bahía de Cádiz y «Liérganes» era la única palabra que era capaz de pronunciar.

Hoy en día está representado en el letrero del pueblo y en una escultura a orillas del río.

Dos fotos de Liérganes: una con las letras del pueblo y otra con un puente en cuya orilla está la escultura del hombre pez.

Parque mitológico de Mina Pepita

En Solares han rehabilitado una antigua explotación minera para convertirla en un parque con diversas esculturas de seres de la mitología cántabra.

Inaugurado en 2015 su acceso es gratuito y su horario de apertura de 10:00 a 20:00. El recorrido es de, aproximadamente, 1,5 kilómetros y es recomendable mirar el mapa ubicado a la entrada para evitar perdernos a alguno de los seres, porque tiene múltiples recovecos.

Para recorrerlo con calma hace falta una hora u hora y media. Si vais con niños no metería el carrito, es más cómoda la mochila y si ha llovido recientemente hay que tener en cuenta que los caminos son de tierra.

Es muy curioso leer la historia de los distintos personajes, desde los buenos, hasta los malvados, pasando por los regulares.

Cuatro esculturas de personajes mitológicos cántabros: arriba a la izquierda Anjana, arriba a la derecha Musgoso, debajo a la izquierda Arquétu y debajo a la derecha Ojáncano
La Anjana, el Musgoso, el Arquetu y el Ojáncano

Bárcena Mayor

En el corazón del parque natural del Saja-Besaya está Bárcena Mayor. Perteneciente al municipio de Los Tojos es muy pequeño, aunque merece la pena admirar sus viviendas con las clásicas balconadas de madera.

Está todo muy cuidado, pero al acudir en un festivo había cierta aglomeración de turistas.

Una casa típica con balconada de madera

Carmona

Situado a una media hora desde Bárcena Mayor es una buena idea aunar ambas visitas. De tamaño pequeño y con casonas montañesas bien conservadas está menos masificado y permite pasear con más tranquilidad.

Una casa típica montañesa cántabra

Puente colgante de Rasines

Si ya habíamos descubierto el Mamut de Rasines y el nacimiento del río Asón ahora volvemos a la zona para ver el puente colgante de Rasines que cruza, precisamente, el citado río.

Esta pasarela, construida en los años 60, ofrece una experiencia no muy apta para aquellos con vértigo y, sin duda, diferente.

Puente colgante de Rasines en Cantabria

Más sitios para visitar en Cantabria:

Cuatro sitios por descubrir en Madrid

Madrid, como Londres, es una de esas ciudades en las que por más veces que hayas estado siempre te quedan lugares por visitar Aquí llegan cuatro sitios por descubrir en Madrid: el Palacio Real, el Mirador desde Cibeles, el Museo del Romanticismo y el Museo del Traje.

Palacio Real

Con más de 135.000 metros cuadrados y 3.418 habitaciones el Palacio Real de Madrid es el más grande de Europa Occidental y uno de los más grandes del mundo.

Su construcción fue ordenada por Felipe V y culminó en 1751. Carlos III fue el primer monarca que lo habitó (alternándolo con los de El Escorial, Aranjuez y La Granja). Previamente, el mismo solar había albergado el Alcázar de Madrid, residencia oficial de los reyes desde Felipe II en 1561, pero se quemó en 1734.

En la actualidad, los monarcas lo siguen usando para diversos actos. La entrada es gratuita de lunes a jueves de 17:00 a 19:00 h. (16:00 a 18:00 en invierno), pero hay que ir un buen rato antes de que empiecen estas franjas horarias, ya que se forman grandes colas.

No tenía grandes expectativas y me sorprendió muy gratamente. Contiene auténticas joyas entre mobiliario, lámparas…

Panorámica del Palacio Real de Madrid en un día soleado.

Mirador desde Cibeles

La torre más alta del Palacio de Cibeles acoge este mirador desde el que se contemplan la Gran Vía, la Castellana y el Retiro, entre otras zonas. El precio de la entrada es de 3 euros.

Acudimos poco antes de que empezase a anochecer y las vistas merecen la pena. Además, tiene señalizados los distintos edificios y lugares, lo que ayuda a identificarlos.

Vista desde el Mirador del Palacio Cibeles de la fuente con la estatua de Cibeles y el inicio de la Gran Vía al anochecer

Museo del Traje

Un recorrido por las vestimentas a través de la Historia. Desde trajes regionales, pasando por moda romántica, francesa y de pasarela.

Los sábados, a partir de las dos, y los domingos la entrada es gratuita y sino cuesta tres euros. Está situado al lado de la Universidad Complutense y el edificio fue, en 1975, el Museo de Arte Contemporáneo.

La exposición permanente se puede visitar virtualmente, aunque de esta forma se pierde la impresión que produce ver tanta pieza histórica en vivo y en directo.

Dos modelos expuestos en el Museo del Traje de Madrid. A la izquierda un vestido blanco con una cómoda y un baúl y a la derecha tres trajes con sombrero.

Museo del Romanticismo

Ubicado en un céntrico palacete (cerca del metro de Tribunal) que data de 1779 tiene cuadros, muebles y objetos de diversa índole relacionados con el Romanticismo en España. Se inauguró en 1924 y gracias al carácter del propio edificio y de sus pertenencias te transporta a la época y transmite una sensación de paz muy agradable.

Al igual que el Museo del Traje, pertenece al Ministerio de Cultura y Deporte por lo que el precio de su entrada y los días gratuitos son los mismos y también permite realizar una visita virtual.

Dos estancias del Museo del Romanticismo de Madrid. A la izquierda un piano de cola y varios retratos gigantes y a la derecha un comedor y una lámpara de araña.

Me despido con algunas de sus citas románticas.

Dos citas literarias. A la izquierda fragmento de Don Juan Tenorio de José Zorrilla y a la derecha fragmento de la Canción del pirata de José de Espronceda

Más sobre Madrid:

¿Qué ver en Avilés? La gran desconocida asturiana

Que Asturias es un paraíso natural está fuera de toda duda. Sus playas, los lagos de Covadonga, los Picos de Europa… son sencillamente preciosos. Todo ello unido a pueblos costeros como Lastres y Llanes, de interior como Cangas de Onís y urbes más grandes como Oviedo y Gijón que merece la pena conocer. Además, el Principado ha vuelto a sorprenderme gratamente con una pequeña joya oculta: Avilés.

La tercera ciudad de Asturias por número de habitantes tiene fama de ser muy industrial. Y lo es, pero también posee rincones que merece la pena conocer. Demos un paseo y descubramos qué ver en Avilés y alrededores.

Su casco histórico, considerado el segundo mejor del Principado tras el de Oviedo y declarado Conjnto Histórico Artístico, está repleto de casas con balcones de madera, miradores y pórticos. Pasear por sus calles es admirar edificios continuamente.

Calle de casas con balcones, miradores y pórticos

El Palacio Camposagrado y el Hórreo que hay en la zona son sólo dos de los puntos de interés.

Dos imágenes: a la izquierda un edificio histórico y a la derecha un hórreo con un árbol delante.

En el mismo casco también está el parque Ferrera, ideal para dar un paseo.

Dos imágenes: a la izquierda unas puertas de piedra y a la derecha un kiosko en un parque soleado.

Si buscas algo más moderno el centro Niemeyer es tu lugar. El centro cultural diseñado por Óscar Niemeyer e inaugurado en 2011 acoge diferentes exposiciones y eventos.

Un edificio moderno la final de un puente en un río.

Avilés tiene algunos ilustres habitantes como Pedro Menéndez de Avilés, adelantado de La Florida, entre cuyos logros destaca fundar una de las ciudades más antiguas de EEUU, San Agustín de la Florida. También el pintor Juan Carreño de Miranda que formó parte de la corte de Carlos II y entre cuya obra están los retratos, vestida y desnuda, de Eugenia Martínez Vallejo. Apodada «La Monstrua» cuenta con una escultura en la ciudad y pertenecía a la misma corte que Carreño, aunque, en su caso y dada la enfermedad que tenía, era más bien considerada un bufón.

Dos imágenes: a la izquierda una escultura de un hombre sentado y a la derecha una escultura de una mujer.

Tras haber terminado nuestro paseo por la urbe, nos queda descubrir qué ver en los alrededores de Avilés. Hay un punto imprescindible: la playa de las Salinas y el Museo de Anclas Philippe Cousteau. Ambas se pueden ver gratuitamente y dando un paseo al aire libre.

Dos imágenes: a la izquierda una panorámica de una playa y a la derecha unas esculturas.

El museo cuenta con un busto de Philippe Cousteau en una roca al borde del mar. Fue el segundo hijo del célebre oceonágrafo Jacques-Yves Cousteau y sucesor del legado de su padre, pero falleció prematuramente en un trágico accidente.

Un busto encima de una roca al borde del mar.

Lo mejor de 2021

2020 y 2021 han sido dos años de vértigo e inolvidables que nos han traído muy buenas y muy malas noticias y muchísimos cambios de calado. Como siempre es mejor ver el lado positivo de las cosas, aquí va un repaso a lo mejor de los últimos doce meses.

Viajes

Volver a mis queridos Londres y Port Aventura y vivirlos desde la perspectiva de un pequeño ser han sido unas experiencias inigualables. Además, en Punta Cana disfrutamos del paradisíaco Caribe.

Punta Cana - Nahia Nebra

Exposiciones

A las clásicas muestras de Barbies y Lego se han unido, en 2021, el descubrimiento del original arte de Okuda y la posibilidad de ver un Portugalete sin Puente Colgante.

Exposiciones de Barbie, Lego, Okuda y Portugalete - Nahia Nebra

Música

El concierto de Sofía Ellar fue emocionante, tanto por su repertorio como por volver a escuchar música en directo.

Concierto Sofía Ellar - Nahia Nebra

Libros

Este año hemos hablado, entre otros, de libros sobre las Guerras Mundiales y de sagas familiares. Prometo, en próximas entradas, nuevas recomendaciones sobre lo que he leído en 2021 y para abrir boca un par de novelas ambientadas en estas fechas.

«The Christmas surprise», de Jenny Colgan, es la tercera parte de la trilogía de Rosie Hopkins (tras «Welcome to Rosie Hopkins’ sweetshop of dreams» y «Christmas at Rosie Hopkins’ sweetshop»). Reencontrarse con el pueblo y los personajes siempre es un placer y el cierre es bonito. Daría para más entregas.

«One minute to midnight», de Amy Silver, sigue las vidas de Nicole y sus amigos durante las Nocheviejas a través de distintas décadas.

The Christmas surprise - Jenny Colgan - One minute to midnight - Amy Silver

Espero que el 2021 nos traiga salud, paz y mucha tranquilidad.

¡Feliz año nuevo!

Lo mejor de 2020

Decir que 2020 ha sido un año raro es quedarse muy corto. Si en enero, y embarazada de siete meses, me dicen que voy a estar confinada en mi casa, que no voy a poder viajar prácticamente a ningún sitio y que la mascarilla se va a convertir en un accesorio indispensable, no me lo hubiese creído.

Admito que era tan sumamente incrédula que, un par de días antes de que nos confinasen, no pensaba que fuera a suceder.

Sin embargo, no todo ha sido negativo. La llegada del bebé ha supuesto, como ya esperábamos, más trabajo, dormir menos y adaptar las rutinas, pero merece la pena al verle tan divertido y sonriente.

Además, aunque más cercanos y diferentes, sí que ha habido viajes y, por supuesto, no han faltado libros, música y nuevas experiencias.

Viajes

La calma y los inmensos arenales de Fuerteventura me han conquistado, convirtiéndola en mi favorita de las islas Canarias.

Por otra parte, nunca es tarde para seguir descubriendo una Cantabria que, como reza el eslogan, es infinita.

Fuerteventura - Nahia Nebra

Libros

Ha sido un año de libros distintos e interesantes y también de reencuentros con sagas míticas. Dedicaré un par de entradas, en 2021, a recomendar lo que más me ha gustado.

Como pequeño adelanto os dejo este collage con las principales portadas en las que veréis a mi querida Sarah Lark, el inicio de ‘Las siete hermanas’ de Lucinda Riley, una visión actual sobre las mujeres musulmanas modernas y a la escritora vasca Alaitz Leceaga.

Libros 2020 - Nahia Nebra

Musicales

No diría que es estrictamente un musical, sino más bien un repaso a las canciones de Mecano con coreografías y escenografías cuidadísimas. ‘Cruz de navajas’ es para fans del trío y me emocionó, tanto por el espectáculo en sí, como por volver a visitar un teatro tras tantos meses sin poder pisarlo.

Cruz de navajas - Nahia Nebra

Me despido de 2020 para dar la bienvenida a un 2021 que se presenta con una reforma integral, con mudanza incluida, pero no quiero decir adiós sin recordar uno de los momentos cumbre del año: montar en globo.

¿Cuándo? ¿Dónde? Nada más y nada menos que en la boda de mi amiga Fran, en el castillo de Arteaga. Casarse en 2020 ha sido un desafío continuo y, a la vez, un acierto total. Sobre todo, por ellos, que lo disfrutaron al máximo, y también por nosotros como invitados, porque nos hizo recordar la importancia de celebrar y nos acercó, aunque fuese por un ratito, a la ansiada normalidad.  

Globo - Nahia Nebra

¡Feliz 2021! ¡Te esperamos normalidad!  

Descubriendo Fuerteventura: playas vírgenes y mucha calma

Que 2020 no es el año de viajeros es una obviedad. Recientemente, Nuria Roca compartía esta reflexión en Instagram:

“Estoy nostálgica de viajar, de coger un avión, de cruzar el charco, de aterrizar en NY… Me ahoga pensar que tenemos que estar quietos, que no podemos movernos y que si lo hacemos no vale la pena… Ojalá todo esto pase pronto y nos podamos tomar la revancha… ¡Ánimo a todos en este puente! Si ahora mismo me preguntan qué es lo que más desearía, ¡sería estar en NY!”

Sustituyendo NY (a la que tampoco me importaría volver) por Londres suscribo sus palabras y la sensación de “ahogo”. Sé que lo más importante ahora es la salud y seguir las pautas que marcan los expertos, pero los meses se hacen largos y cada vez se ve más lejos la ansiada vuelta a la “normalidad” (o a lo que antes considerábamos normal, al menos).

Sin embargo, no todo va a ser negativo y 2020 al menos sí me ha traído una pequeña escapada a una de las islas Canarias que no conocía: Fuerteventura.

Tras visitar Tenerife, Lanzarote y Gran Canaria tenía muchas ganas de descubrir qué tenía que ofrecer este enclave. Además, ha sido la primera vez que viajamos con bebé y su primer vuelo, así que las novedades eran muchas.

No sé si ha influido que es el primer y único viaje de 2020 o hubiese ocurrido de cualquier forma, pero se ha convertido en mi destino favorito de Canarias.

Playas interminables y vacías, paisaje volcánico y desértico, dunas de gran altura e incluso arena que simula palomitas convierten a Fuerteventura en un auténtico paraíso

El ritmo con un bebé (al que los vuelos le encantaron tanto que no pudo parar de moverse) es más lento que el de dos adultos solos y tampoco íbamos muchos días, por lo que decidimos concentrar los desplazamientos y dejar cosas para ver en posteriores visitas.

Nos hospedamos en Caleta de Fuste, muy cerca del aeropuerto y más o menos en la mitad de la isla para poder conocer el Norte y el Sur.

Dedicamos una jornada a las playas de Jandía, concretamente a la de Sotavento, que no está tan al Sur y que forma parte de Costa Calma.

Playa de Sotavento - Fuerteventura - Nahia Nebra

Accedimos al lado de un hotel Meliá y paseamos unas horas. No nos encontramos prácticamente con nadie y el paisaje impresionaba por su soledad y magnitud.

Dejamos el Norte para otra jornada en la que vimos la famosa Popcorn beach, cuya arena está compuesta por coral blanco. En las fotos es cierto que parecen auténticas palomitas de maíz, aunque en directo la similitud es menor.

Popcorn Beach - Fuerteventura - Nahia Nebra

Finalizamos nuestro día norteño en el Parque Natural de Corralejo, conocido por sus enormes dunas. Entramos a la playa tras dejar el hotel Riu unos kilómetros atrás y también estuvimos prácticamente solos. Es muy recomendable recorrer la carretera que atraviesa el parque porque permite admirar el exótico paisaje.

Dunas de Corralejo - Fuerteventura - Nahia Nebra

Fuerteventura es un remanso de paz y tranquilidad al que quiero volver para descansar, desconectar y seguir descubriéndolo.

Más playas:

Descubriendo las islas griegas: Mykonos y Santorini

Tras nuestro paso por Atenas, ¿qué mejor forma de seguir conociendo el país que descubrir dos de sus islas más famosas?

Mykonos se ha convertido en un destino turístico relacionado con el ocio nocturno. Eso hizo que dudásemos sobre si merecía la pena visitarla, porque íbamos a hacer un viaje más de relax, pero su fama la precede y acabamos optando por pasar unos días en ella.

Volamos desde la capital a primerísima hora, al llegar alquilamos un coche (para moverte por las islas es muy conveniente tener uno) y recorrimos Chora (su capital), que estaba prácticamente vacía antes de que los comercios abriesen.

Chora es el pueblo con más encanto que vimos. Sus calles estrechas, sus edificios bajitos y blancos, sus pequeñas iglesias, el antiguo puerto, la zona de Little Venice con sus casas colgando en el agua… es lo que uno se imagina del lugar antes de venir.

Chora - Mykonos - Nahia Nebra

Sin olvidar los molinos de viento de Kato Milli, uno de sus emblemas. El viento es protagonista en Mykonos y evita que, pese a estar en pleno agosto, la sensación térmica sea de excesivo calor.

Todo ello se ve rapidito y las distintas playas son agradables, sin ser espectaculares. Es recomendable disfrutar de Chora por la mañana, sin actividad, y callejear tranquilo y por la noche, con todos sus comercios y hostelería en plena ebullición. Parecen sitios distintos.

Molinos de Kato Milli - Mykonos - Nahia Nebra

Aprovechamos nuestra estancia para hacer una excursión a las islas de Rhenia y Delos en una embarcación clásica llamada Kaiki. Ambas son pequeñas y están deshabitadas actualmente.

En Rhenia nos dimos un chapuzón en una idílica playa y en Delos, donde según la mitología griega nacieron los dioses y hermanos gemelos Apolo y Artemisa, visitamos el conjunto de ruinas.

La salida es muy interesante, aunque el enorme oleaje, que hacía que zozobrara la embarcación, no sólo nos mareó, sino que nos hizo temer por nuestra seguridad.

Rhenia y Delos - Nahia Nebra

Tras Mykonos tomamos un ferry (con un enorme retraso, que debe de ser algo relativamente habitual) rumbo a Santorini.

Situada dentro de una caldera volcánica, con una gran parte sumergida, son cinco islas en total de las que Santorini es la principal.

La Caldera - Santorini - Nahia Nebra

Sus arenales son negros y, la mayoría, de piedra lo que dificulta el movimiento y el baño. La más original es la denominada «Playa Roja» por su color. Interesante para admirar, pero incómoda para broncearse.

Al lado está el yacimiento arqueológico de Akrotori. Si no sois expertos en la materia y habéis estado en Atenas no aporta nada diferente.

Red Beach - Santorini - Nahia Nebra

Santorini es famosa por sus puestas de sol y por las cúpulas azules de Oía, lo que provoca un tumulto de gente que aplaude al sol por ponerse, como si no sucediese en todos los sitios y todos los días semejante fenómeno.

Oía es bonito, pero tanta aglomeración resulta agobiante. En la cercana localidad de Fira puede contemplarse un fenómeno idéntico con mucho más espacio.

Cúpulas azules - Santorini - Nahia Nebra